
Regalos únicos para el día de la madre
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2. AYUDA EN EL JARDÍN Hay muchas maneras de hacerlo. Ayúdala a quitar las malezas o encárgate de esta tarea. Llévala a un vivero para escoger las plantas de estación. Pasa unas horas
trabajando juntos en su jardín. El fin de semana del Día de la Madre es una de las épocas más concurridas en los centros de jardinería porque se considera el comienzo de la primavera, según
Angela Cavotta, de 64 años, dueña de Cavotta’s Garden Center en Cleveland, Ohio. Entretenimiento Paramount+ 10% de descuento en cualquier plan de Paramount+ See more Entretenimiento offers
> “El artículo más comprado para el Día de la Madre es una canasta de flores para colgar afuera”, dice ella. “Después de meses de mal tiempo, es como una brisa de aire fresco para la
primavera”. Para los que quieren algo que dure más, Cavotta recomienda plantas perennes, como las hortensias, las azaleas o la glicina. Si tu madre ya no vive, piensa en celebrar en su honor
plantando flores para ti en una maceta o en el jardín. 3. LLENA UN "FRASCO DE LA ALEGRÍA" CON MENSAJES Este obsequio económico y creativo simplemente se trata de un frasco lleno
de trozos de papel escritos con halagos, recuerdos o notas de agradecimiento. La idea es que las mamás lean un mensaje por día, por semana o cuando les parezca. Sue Spike, de 71 años,
recibió un frasco de la alegría hace dos años de su hija Corrie. Algunos mensajes tienen sentimientos cortos de una oración (“Me enorgullece que cumplas tu meta de caminar y que te mantengas
activa”), mientras que otros expresan recuerdos largos en gran detalle (como una anécdota sobre la búsqueda de unos zapatos plateados). Para llenar el frasco, la hija pidió ayuda a la
familia. Los mensajes son de los tres hijos de Spike, de los cónyuges de estos y de sus ocho nietos. “Algunos mensajes te hacen reír y otros sería mejor olvidarlos”, dice Spike, higienista
dental certificada jubilada, que vive en Penn Yan, Nueva York, y mantiene el frasco en un sitio visible del armario de la sala de estar. Agrega que los mensajes forjaron una conexión
especial con sus seres queridos durante la pandemia. “Cuando los leo, me saltan las lágrimas de felicidad y me río. Me alegran mucho más el día”.