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Jimmy y Becky Neeley, ahora de 70 y 68 años, viven en Rockwall, Texas. En este artículo, adaptado por StoryCorps (en inglés), la pareja recuerda su historia de amor, desde su noviazgo en la

escuela secundaria y una propuesta de matrimonio fallida hasta su reencuentro décadas después. JIMMY NEELEY: Teníamos una clase juntos. Así fue como te vi por primera vez. BECKY NEELEY: Era

1969. Era tu último año y mi segundo año en la secundaria Longview High School. JIMMY: Te invité a salir, y fui tu primera cita. Fuimos novios durante ese año.  BECKY: Y luego, después de tu

último año, decidiste alistarte. Solo tenías 17 años. JIMMY: Estaba nervioso esperando tus cartas. Ya había comprado un anillo de compromiso y estaba planeando pedirte que te casaras

conmigo. Estaba bastante seguro de que dirías que sí. BECKY: Ni siquiera miré el anillo. Solo dije: “No, no puedo casarme contigo”. Mi mamá no quería que estuviese involucrada con alguien en

el servicio militar durante la guerra de Vietnam. Mi padre resultó herido en la Segunda Guerra Mundial, así que tal vez esa era una razón. “Simplemente rompe con él”, dijo mi madre. JIMMY: 

Te fuiste a la universidad, conociste a tu esposo y estuviste casada por 43 años. La vida nos llevó por diferentes caminos. Pero siempre me preguntaba cómo estabas.  BECKY: Enviudé en el

2017. Vi a mi esposo dar su último aliento en nuestra cama, en la casa en la que habíamos vivido durante 30 años. Tenía cáncer. Yo tenía 62 años y no esperaba ser una viuda tan joven.

Alrededor de un año y medio después, mi hija me sugirió que estuviese más activa en Facebook, y vi tu foto. Llevabas tu uniforme de policía, y pensé: ¿Ese es mi Jimmy Neeley? Y entonces vi

que habías enviudado. JIMMY: Mi esposa y yo estuvimos juntos durante 34 años, y ella estuvo muy enferma en los últimos 8 años de su vida. No sabía si alguna vez saldría con alguien de nuevo.

Cuando recibí tu mensaje, me dijiste que comprendías porque perdiste a tu esposo. Y pensé: Sería genial tomar café y hablar de los viejos tiempos. BECKY: Nuestros autos llegaron al mismo

tiempo. Me sentía como una adolescente de nuevo, yendo a mi primera cita. JIMMY: Estaba en el séptimo cielo, y estaba emocionado de hablar contigo de nuevo. Te llamaba y hablábamos horas por

teléfono. No tardé mucho tiempo en darme cuenta de que me estaba enamorando de ti.  BECKY: Mi corazón se inclinaba hacia un compromiso más profundo contigo. Pero todavía estaba muy

asustada. Entonces, mi hijo me dijo: “Mamá, ¿por qué evitarías la felicidad que Dios te brindó?”. JIMMY: Regresamos al mismo lugar de hace 49 años, y te pedí que te casaras conmigo de nuevo.

Esta vez dijiste que sí. BECKY: Tus padres se casaron el Día de San Valentín, así que esa es la fecha que elegimos: 14 de febrero del 2020. JIMMY: Eres mi enamorada. Me despierto y cada día

le doy gracias a Dios por traerte de vuelta a mi vida. Soy muy feliz.