Parejas comentan sobre su obsesión por los cruceros

Parejas comentan sobre su obsesión por los cruceros


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RETORNAR AL MAR ABIERTO Norma Starr y Mitchell Schneidkraut en un crucero de Nueva York a Islandia con Regent en el 2018. CORTESÍA DE NORMA STARR Y MITCHELL SCHNEIDKRAUT Norma Starr y su


esposo, Mitchell Schneidkraut, ambos de 72 años y residentes de Birmingham, Alabama, han realizado unos 30 cruceros en los últimos 15 años. Pero no han navegado desde agosto del 2019 debido


a la COVID-19. Es la primera vez que pasan más de un año sin navegar. "¡Quiero salir al mar abierto! Birmingham es bonito, pero estoy cansada de mirar cuatro paredes", dice Starr.


"Le sigo diciendo a mi esposo que lo primero que voy a hacer cuando embarque es besar el suelo. No lo haré porque se vería realmente de mal gusto, pero estaré muy feliz". La pareja


cuenta los días hasta enero, cuando tienen reservado un crucero por el mundo de 120 días con Regent Seven Seas Cruises, que zarpa de San Francisco. Aun así, están tan ansiosos por regresar


al mar que han reservado un par de cruceros en el ínterin: un crucero de 7 días por las Bahamas en julio con Crystal Cruises y un crucero Regent de 27 días en noviembre desde Grecia a Miami.


Entretenimiento Paramount+ 10% de descuento en cualquier plan de Paramount+ See more Entretenimiento offers > TODOS VACUNADOS Nina Yablok y su esposo se volvieron a casar en un crucero


por la riviera mexicana en el 2014. CORTESÍA DE NINA YABLOK "No me preocupa en absoluto nuestro crucero", dice Nina Yablok, de 73 años, de Nemo, Texas. "Estoy vacunada, y


también lo estarán todos los demás en el barco. Si me contagio de COVID, no será un caso grave", dice. "Elijo no dejar que el miedo dirija mi vida". Yablok y su esposo, que


han tomado 17 cruceros desde el 2005, también estarán a bordo de un crucero Crystal por las Bahamas este verano, que ella reservó minutos después de que saliera a la venta a la medianoche


del 16 de marzo. Normalmente, Yablok no estaría despierta a esas horas, pero se moría de ganas de volver al mar y no podía esperar a conseguir un camarote. "¡Estoy listísima para


esto!", dice. "Estoy muy emocionada por volver a navegar". ¿Qué tan emocionada? Ya ha comenzado a hacer la maleta; ya se le antoja su postre favorito de Crystal, un suflé


dulce llamado "Salzburger Nockerl"; y ya ha planeado la parada en Bimini, donde espera que mucha gente baje del barco. Se quedará a bordo con su esposo y se instalará en una butaca


junto a la piscina. "Me pondré con mi Kindle, que estará cargado de toneladas de misterios acogedores que no requieren de mucha concentración, y luego no leeré ni una palabra.


Observaré a la gente", dice. LA SEGURIDAD Y SANIDAD DE LOS BARCOS SON RECONFORTANTES "Todas las líneas de cruceros están tomando todas las precauciones y hacen todo lo posible para


mantener a todos a salvo", dice Craig Savela, un ávido crucerista de San Antonio. Él y su esposa, Sheryl, ambos de 70 años, han tomado 45 cruceros desde el 2010 y tienen varios más


reservados, incluido un crucero por el río Rin con AMAWaterways en agosto y un crucero por México desde Galveston, Texas, con Royal Caribbean International en noviembre. Y ya tienen


reservado un crucero por el Caribe para la próxima primavera, un viaje transatlántico a España y un crucero por las islas griegas que luego navegará a Dubai y a Ciudad del Cabo, en


Sudáfrica.