«me niego a pensar en otro año sin temporada alta» | diario sur

«me niego a pensar en otro año sin temporada alta» | diario sur


Play all audios:


Pasa lo que jamás hubiera pensado Francisco Flores que iba a pasar. Este malagueño de 53 años, nacido en el Molinillo, echa de menos ... no tener tiempo. Lo que siempre ha sido un bien


preciado en cualquier sociedad moderna, le sobra desde que el mundo empezó a dejar de ser el mismo que era en marzo de 2020. Hasta entonces, Francisco, cara risueña, pelo canoso, trabajaba


de administrativo en el Holiday World Benalmádena, uno de los grandes complejos turísticos de la Costa del Sol. «Estaba en el departamento de compras. Cualquier producto que entra o sale en


el hotel queda registrado», detalla sobre una maquinaria perfectamente engrasada para poder rastrear cada movimiento contable. Francisco empezó a trabajar en su puesto en 2004 como fijo


discontinuo. Una figura laboral que se adapta a la estacionalidad del turismo en la Costa del Sol. «En los últimos años, la cosa iba tan bien que la estacionalidad casi dejó de existir. Yo


paraba en diciembre y volvía a enganchar en febrero. Mis amigos me decían que era como un maestro, solo que con vacaciones en invierno», explica. Ahora hace casi un año desde que está en un


ERTE y ya no le empieza ni a servir el deporte, que para él siempre ha sido la mejor medicina para evadirse de los problemas. Siempre los ha habido, pero nada que se pueda comparar a la


situación por la que pasa su economía familiar en estos momentos. «Tengo dos hijos que dependen de mí y una hipoteca. Ingreso un 40% menos de lo que tenía de nómina. Me salva que el banco me


ha aplazado un año la hipoteca y que mi mujer sí está trabajando», relata. No obstante, señala, que su situación se hará insostenible si el turismo no se recupera pronto. «Me niego a pensar


en otro año sin temporada alta. A partir de mayo necesitamos una huida hacia adelante, sino aquí va a haber mucha gente pasando hambre», dice.