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En 2024, el ejercicio más trágico en las carreteras de la última década, perecieron 45 personas en la provincia de Granada, frente a las 29 ... muertes registradas en 2023, un 48,27% más de

mortalidad de un año a otro. Los datos de la DGT a 15 de abril apuntan que en que va de 2025 han muerto nueve personas en las vías de la provincia, una cifra casi idéntica a del ejercicio

anterior. En esta siniestralidad influyen muchos factores. El incumplimiento de las normas de circulación, el consumo de sustancias prohibidas o el estado de las carreteras son algunos de

ellos. La DGT provincial está estudiando cuáles son los tramos de más siniestralidad para intentar reducirla. La A-92 fue la vía que más muertos registró en 2024, seis de los 45.

Especialmente peligroso es el tramo entre los kilómetros 177 y 241, así lo explica en declaraciones a IDEAL el director provincial de la Dirección General de Tráfico, Juan Diego Ramírez. La

velocidad inadecuada estuvo detrás de gran parte de estos siniestros. No es la única vía peligrosa. Para las motos, cuyos conductores sufrieron el 33% del total de accidentes de 2024, hay

tres vías especialmente peligrosas, la N-340, la A-395 y la A-348. De hecho, en lo que va de 2025 tres de los fallecidos en vehículo de dos ruedas tuvieron sus accidentes precisamente en

estas vías. El joven de 16 años que falleció en Almuñécar en febrero tuvo el siniestro en el enlace de conexión entre la carretera N-340 con la autovía A-7, cuando conducía de camino al

instituto con su moto. Asimismo, las dos motos que colisionaron el ultimo fin de semana de marzo, en un choque que se saldó con un muerto y un herido grave, sufrieron el impacto en la A-348.

Y un niño de sólo cuatro años perdió la vida en un accidente entre dos vehículos en la A-395. Los puntos más peligrosos parece, de momento, que siguen siendo los mismos. En concreto, en el

caso de la N-340, desde la DGT indican que la parte conocida como las curvas de Almuñécar, entre los kilómetros 308 y 340, y el entorno de Motril, son los tramos más complicados. En la

A-395, si bien hay riesgo en toda su longitud, entre los kilómetros 4 y 26 es donde se concentran más accidentes. Mientras que en la A-348 es entre el kilómetro 23 y el 55, en la zona que

hay más riesgo. Para hacer frente a esta situación, desde la DGT han incrementado la vigilancia, con drones y helicóptero y han aumentado la presencia de agentes de tráfico para intentar que

los conductores tengan más precaución. Paralelamente, trabajan con los titulares de las vías para analizar si es necesario hacer algunas intervenciones de mejora. Otro punto de elevada

siniestralidad es la GR-30, aunque en este caso, según indica Ramírez, se trata de siniestros en los que la mortalidad es reducida. En esta vía, de hecho, se ha instalado el primer radar de

tramo de la provincia, con el objetivo de reducir la accidentabilidad vinculada al exceso de velocidad. Y es una carretera, en la que según apuntó el responsable de la DGT en Granada, se

podría considerar en el futuro colocar otro radar de este tipo. Peatones y ciclistas En cuanto al Área Metropolitana, desde la dirección provincial de tráfico señalan que hay varios puntos

con elevada siniestralidad de ciclistas y peatones, especialmente en el entorno de la Vega, entre las que se encuentran la GR-3304, la GR-3417 o la GR-3201. También la A-338, en las

inmediaciones de la Base Aérea de Armilla. Europa marca para 2050 el objetivo 0 accidentes. El director provincial de la DGT dijo en una entrevista a IDEAL que ellos trabajan creyendo que es

posible de conseguir. Y precisamente por eso consideran importante conocer dónde hay más siniestros y cómo evitarlos.