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Miércoles, 28 de mayo 2025, 11:48 Comenta Compartir Más de 1.500 metros de lona innífuga se despliegan desde este miércoles en las calles Corredera y Alporchones, y este año por primera vez

en la calle Pío XII, para mitigar el calor en los meses de verano. Con la creación de pasillos de sombra en estas calles peatonales del casco antiguo se pretende favorecer el comercio en las

horas centrales del día. El Ayuntamiento adquirió los toldos en 2022 tras culminar el proyecto piloto europeo Life Adaptate con resultados muy positivos, ya que tras las mediciones

realizadas se comprobó una reducción de la temperatura en las zonas de sombraje de cinco grados con respecto a las no protegidas, y de entre diez y quince grados en el suelo, por lo que la

sensación térmica es sensiblemente inferior en las calles cubiertas. La actuación cuenta con un presupuesto de 104.000 euros, que incluye la instalación y retirada de los toldos, la

limpieza, reposición de las telas en mal estado y la adquisición del material necesario para la zona de ampliación, según explicó el concejal de Turismo, Santiago Parra. Será ejecutada con

el Plan de Sostenibilidad Turística de los Fondos Next Generation de la Unión Europea, En la plaza Arcoíris los hosteleros reclamaron en 2020 que no se retiraran tras el verano y han

comprobado los beneficios en sus terrazas en los meses de invierno. Parra detalló que en la calle Pío XII los toldos cubrirán una superficie de 400 metros cuadrados, desde el Casino hasta la

calle Zorrilla. Recordó que la creación de espacios de sombra en esta zona era una «reivindicación histórica de los viandantes y sobre todo de los comerciantes». Después de obtener las

autorizaciones pertinentes de los propietarios de las fachadas ya se están colocando los nuevos anclajes. Comenta Reporta un error