Reader TTS

Martes, 27 de mayo 2025, 10:48 Comenta Compartir En el paisaje de las obras para la integración del AVE en Lorca sobresalen unas titánicas siluetas que se mueven como incansables y

laboriosos autómatas. Son 11 grúas sobre cadenas de grandes dimensiones que trabajan en el soterramiento del AVE bajo la ciudad y en la construcción de la nueva estación de Sutullena. El

despliegue de maquinaria pesada y de obreros es muy visible desde casi cualquier punto de Lorca, y las altas estructuras metálicas móviles forman parte ya del escenario urbano de la ciudad.

Por la magnitud de la obra y su imponente presupuesto se puede advertir la transformación que supondrá para el casco urbano, que dejará de estar divido en dos por las vías del tren. Algunos

de los equipos están ejecutando muros pantalla, que sustentarán el túnel, mediante cucharas de cable y otros llevan a cabo tareas de elevación de armaduras y trabajos auxiliares, según

confirmaron a LA VERDAD fuentes de la empresa Liebherr Ibérica. Las obras, que fueron adjudicadas hace más de un año por 328 millones de euros, avanzan imparables en los tres tramos en los

que se divide la integración del Corredor Mediterráneo. Tiene una longitud de 3,2 kilómetros e incluye la construcción de un túnel de 2,9 kilómetros entre el barrio de San Diego y el colegio

Ana Caicedo. «Nuestro principal cometido es la ejecución de muros pantalla y la idea es que contengan el empuje de las tierras», indicó Alberto Ortiz, gerente de Tectonic, una empresa

especializada en trabajos de geotécnica. Algunos de los equipos están perforando muros pantalla de entre 1.000 y 1.200 milímetros de ancho y a una profundidad de entre 15 y 34 metros

mediante cucharas de cable, añadió Pilar Carmona, gerente de Pantaex. Las principales dificultades del proyecto son la coordinación de equipos de maquinaria, el gran volumen de metros

cuadrados de ejecución de muros pantalla y la propia dureza del terreno. Esto provocó que se tuviera que realizar una descompresión de la superficie con una pilotadora de rotación. Se

utilizan máquinas con tecnología de última generación y «altas prestaciones, con una gran capacidad de rendimiento y específicas para las tareas que desempeñamos», indicó Ortiz. Cuando

finalicen las obras la superficie resultante se convertirá en un gran corredor verde para el uso y disfrute de los ciudadanos, bajo el que pasarán los trenes. Comenta Reporta un error