
Historias de víctimas de estafas
- Select a language for the TTS:
- Spanish Female
- Spanish Male
- Spanish Latin American Female
- Spanish Latin American Male
- Language selected: (auto detect) - ES
Play all audios:

EL DELITO: ESTAFA ROMÁNTICA Lisa tenía 68 años cuando, a comienzos de la pandemia de COVID-19, perdió a su marido, que había estado enfermo durante años. La exenfermera se volcó a internet
en busca de personas que estuvieran experimentando ese mismo dolor. Pero lo que halló fueron depredadores. “Encontraron a una mujer que era enfermera, así que sabían que tenía algo de
dinero”, dijo su hija Christine sobre los estafadores con quienes Lisa se conectó en línea. “Cuando papá murió fue cuando de verdad atacaron duro”. Pronto, Lisa se vio inmersa en un remolino
de relaciones cibernéticas. Luego, comenzaron a llegar los pedidos de dinero: miles de dólares para ayudar con los gastos escolares de un niño y dinero para pagar por el servicio de
internet. Durante un viaje del 4 de Julio, Christine fue testigo del grado de obsesión de su madre, quien se alejaba constantemente del grupo para comunicarse con estos desconocidos.
Entretenimiento Paramount+ 10% de descuento en cualquier plan de Paramount+ See more Entretenimiento offers > “Y después me di cuenta de que no le quedaba dinero en sus ahorros”, dijo
Christine. Su madre vendió objetos valiosos y hasta pidió un préstamo sobre el título de su auto. Cuando Christine trató de intervenir, se pelearon. “Cualquier cosa que le dijera, ella
respondía que yo estaba loca, que estaba tratando de impedir que ella conociera a su amor, que yo estaba tratando de controlarla”, recuerda Christine. Una inspección de sus recibos reveló
que en el transcurso de varios meses Lisa había enviado al menos $120,000 a delincuentes en internet. Christine sintió la pérdida de su padre y también el distanciamiento de su madre. “No sé
qué más se puede hacer. Tantas personas le han dicho que esto es una estafa, y ella se cierra y no habla”, dice. Según el FBI, las estafas románticas causaron pérdidas a sus víctimas de más
de $600 millones en el 2020. Detrás de esos números hay familias enteras que se han visto destrozadas emocional y económicamente. Como la de Debbie, una mujer de algo más de 70 años, y su
hijo Ben. Debbie había enviudado hacía más de diez años cuando se volcó a buscar amor en internet. Un hombre, que dijo llamarse Joshua, comenzó a hablar con ella mientras jugaban a _Words
With Friends_. Joshua fue paciente. Pasaron meses desde su primera conversación hasta que Debbie finalmente accedió a una relación en línea más íntima. A partir de ahí, las cosas avanzaron
con rapidez. Joshua dijo que su hijo estaba en dificultades y le pidió a Debbie que le enviara $800. Luego vinieron los pedidos de dinero para resolver problemas de pasaporte, problemas
legales, dinero para un desastre en el trabajo... En cierto momento, Debbie puso decenas de miles de dólares en un sobre de FedEx y lo envió. Para cuando Ben descubrió lo que pasaba, su
madre había vaciado sus cuentas de jubilación. En total, le había enviado a Joshua y a un par de otros candidatos alrededor de $300,000. “Fue tan devastador leer sus mensajes de texto”, dice
Ben. “¿Por qué no habló con nosotros?”. Ben finalmente convenció a su madre de que Joshua no era legítimo y le cerró las cuentas. Ahora, Debbie debe enfrentar la abrumadora pérdida de sus
ahorros de toda una vida. “Sobreviví a la viudez, sobreviví al cáncer... y también voy a sobrevivir a esto”, dice. “Solo que no será fácil”. RYAN INZANA EL DELITO: ESTAFA DE VENTAS FALSAS
DE MASCOTAS POR INTERNET En la familia de Danny Shelton siempre hubo perros grandes. De modo que cuando Lois, la mascota de la familia, enfermó de cáncer, quedaron destruidos. Shelton
decidió sorprender a su esposa con un nuevo cachorrito. Buscó en internet y encontró justo lo que buscaba. “El perro se llamaba London. Llevaba puesta una gorrita de Navidad”, dice Shelton.
Luego de una breve conversación telefónica, se cerró el trato. London estaba en Georgia, dijo el criador, pero se lo podía enviar por avión a San Luis por $700. Danny transfirió el dinero
desde una tienda Walmart y recibió un contrato de compraventa por correo electrónico. Se preparó para sorprender a su esposa. Pero luego el criador le envió un mensaje de texto que decía:
“Hay un problema en el aeropuerto de Atlanta. El control de seguridad del aeropuerto ha puesto al perro en cuarentena y necesitan otros $500 para liberarlo”. Ese fue el momento en el que
Shelton sintió como un puñetazo en el estómago. Se había sumado a la creciente lista de personas engañadas por criadores falsos en internet. El Better Business Bureau (BBB) dijo que las
denuncias de estafas de mascotas se han casi sextuplicado desde que la organización evaluó el problema por última vez en el 2017. “Muchas personas están verdaderamente devastadas
emocionalmente”, dijo Steve Baker, del BBB. La historia de Shelton tiene un final feliz. Una criadora se enteró de lo que había ocurrido y le permitió a Shelton elegir un cachorrito de su
siguiente camada. Cuando la familia visitó a la criadora, una de las perritas corrió inmediatamente hacia Shelton. “Fue ella la que me eligió”, afirma él. Ryan Inzana EL DELITO: ESTAFAS
PONZI DE INVERSIÓN “Doc” Gallagher (que se autodenominaba “Money Doctor”, o doctor del dinero) parecía el mejor amigo de todos. Tenía tres programas de radio en Dallas. Fue maestro de
ceremonias del evento anual de recaudación de fondos _Spectacular Senior Follies_. Era el vecino que siempre enviaba un libro o flores o te visitaba en el hospital. Y "recaudó"
millones de dólares en fondos de inversión mientras les prometía a los clientes que nunca perderían un centavo. Parecía probarlo con el envío periódico de cheques por generosas
“bonificaciones”. “Por supuesto, sentí curiosidad”, dice el inversor Larry Burdine. “Acabábamos de atravesar [la crisis financiera del] 2008 en la que prácticamente todos, y me incluyo,
habíamos perdido casi el 30% de nuestro patrimonio neto”. Así que Burdine y algunos familiares invirtieron alrededor de $250,000 con Gallagher. El nombre real del “doctor del dinero” es
William Neil Gallagher y, efectivamente, posee un doctorado... en Filosofía. También tiene una personalidad carismática. Gallagher seducía a quienes se mostraban reacios a confiar en él con
lo que parecían desmesurados actos de amor. Burdine todavía era escéptico cuando Gallagher lo visitó en el hospital, justo antes de que le realizaran un procedimiento cardíaco atemorizante.
“Nos arrodillamos. nos tomamos de la mano y ‛Doc′ rezó por mi recuperación. Luego se fue. Y, bueno, unas dos semanas después le transferí mi cuenta IRA”, cuenta Burdine. Después de eso,
Burdine no supo mucho de Gallagher. Y luego llegó la noticia de que el “doctor del dinero” estaba preso. Lo habían arrestado por fraude de títulos y valores. Gallagher había mentido sobre su
licencia para vender inversiones. Para cuando el FBI revisó el caos de papeles acumulado en su oficina, había quedado claro que lo que Gallagher había hecho era operar una clásica estafa
Ponzi. Recolectó $20 millones. En noviembre, Gallagher, de 80 años, recibió tres sentencias de prisión perpetua, más 30 años por fraude y explotación de personas mayores. Los lugareños ahora
lo llaman _el Bernie Madoff de Texas_. En gran medida, la inversión de Burdine se perdió. “La tradicional estafa Ponzi sigue viva y coleando, y puede ser difícil de detectar”, afirma Gerri
Walsh, presidente de FINRA Investor Education Foundation. Y Gallagher utilizó la religión para abrir puertas. “Se escudó en la religión”, dijo Dave Lieber, periodista de investigación de
Dallas. “Eso es algo muy detestable, pero, lamentablemente, no es infrecuente”.