Así vive el comediante andrew dice clay

Así vive el comediante andrew dice clay


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Andrew Silverstein, de 64 años, ganó fama en la década de 1980 al crear un _alter ego_, el rudo cómico Andrew Dice Clay, descrito por_ The New York_ Times como un personaje


"escandalosamente ofensivo y especialmente sexista", que figura "entre los grandes de la comedia". Fue el primer comediante de monólogos que agotó las entradas durante


dos noches consecutivas en el Madison Square Garden, y últimamente se ha hecho famoso como actor de reparto: compartió una nominación al premio Screen Actors Guild con Lady Gaga y Bradley


Cooper por_ A Star Is Born_. Ahora interpreta a Butchie, un mafioso, en _Pam & Tommy_ (Hulu, 2 de febrero - enlace en inglés), película basada en la historia real detrás del primer video


viral de la historia, la cinta sexual de Pamela Anderson y Tommy Lee. Él contó a AARP 10 cosas que probablemente no sabes sobre Andrew Dice Clay. 1. QUERÍA ACTUAR, NO CONTAR CHISTES Empecé


como actor. No me importaba nada la comedia. Pero en lugar de ir la escuela de actuación, me subía a un escenario cada noche. Se impuso mi carrera como cómico de monólogos. Simplemente, me


convertí en un fenómeno. Eso perjudicó mi trabajo como actor dramático durante algún tiempo. En la última década he podido trabajar con personas como Scorsese _(Vinyl_) y Woody Allen _(Blue


Jasmine_). Realmente, siempre quise interpretar ese tipo de papeles. Me alegro de poder hacerlo ahora. 2. SE JUNTABA CON FIGURAS POPULARES Los años 80 y 90 fueron una época decadente en el


rock and roll y en la comedia. Salía con Billy Idol, Guns N' Roses, y algunos de ellos se convirtieron en verdaderos amigos. Era una locura, no podía creerlo. A Tommy Lee —él estaba con


Heather Locklear entonces—, yo le caía bien. Tommy me agarró y me dijo: "¿Quieres actuar con nosotros en el Garden?". No podía creer que me hablara. Esto fue antes de que mi


carrera despegara. Dije: "Si estás tan loco como para aceptarme, yo estoy igual de loco como para hacerlo". Por supuesto, nunca tuve noticias suyas. Reconectamos cuando fui a un


concierto de Bon Jovi. ​ 3. ES RESPETUOSO Iba mucho a Crave, en Sunset Boulevard, y Pamela Anderson siempre estaba allí con sus amigas. Me solía sentar a su lado, pero a no ser que conociera


a alguien, no me iba a meter en la vida de otro famoso. No quería que me molestaran y no quería molestar a nadie. A no ser que hiciera contacto visual con otra persona, a modo de saludo, y


sin darnos cuenta entabláramos una conversación.