Vargas llosa, un enamorado de granada y de federico | ideal

Vargas llosa, un enamorado de granada y de federico | ideal


Play all audios:


El escritor y Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, cuyo fallecimiento se ha conocido en el día de hoy, disfrutó de la ciudad de ... Granada en varias ocasiones. Clave fue su


visita en el año 2010, un año después de que la UGR le concediera el Doctorado Honoris Causa, con ocasión del Festival Internacional de Poesía. La hoy codirectora de este festival, la


catedrática de la UGR Remedios Sánchez, tiene un gran recuerdo de aquella estancia del autor hispano-peruano en la ciudad. «Llegamos a un acuerdo para que viniera unos meses antes de que se


le concediera el Premio Nobel. Lo normal es que cuando se obtiene un galardón de estas características, las agendas se modifiquen, porque el aluvión de peticiones que se reciben es enorme.


Sin embargo, Vargas Llosa demostró que era un caballero, y una persona verdaderamente comprometida con la literatura. No sólo no canceló su presencia, sino que mantuvo los emolumentos que


teníamos pactados, algo completamente inusual», afirma Sánchez. Noticias relacionadas «Su gran disposición», continúa la catedrática, «permitió mantener el programa tal como se había


concebido. Fue impresionante ver cómo para un acto literario se llenaron ambas salas del Centro Cultural Manuel de Falla, y cómo se preocupó por conocer la historia del festival y quiénes le


habían precedido». Fue, cuenta Sánchez, una persona tremendamente cercana, con una bonhomía sin límites. Firmó cuantos libros le presentaron, se hizo todas las fotos que se le pidieron, y


no tuvo prisa nunca para contestar a las preguntas que le hicieron los lectores, señala. Del mismo modo, se interesó mucho por Granada como ciudad fusión de culturas, y por la figura de


Federico García Lorca. Precisamente, fue el hoy codirector del Festival Internacional de Poesía, Daniel Rodríguez Moya, quien le acompañó en una visita personal a las casas museo de Lorca en


Fuentevaqueros y Valderrubio. Acompañados por quien fuera director del Museo fuenterino, el recordado Alfonso Alcalá, recorrieron las estancias y tuvieron la oportunidad de hablar mucho de


literatura. «Recordé con él la relación que había mantenido con la poeta nicaragüense Claribel Alegría, con quien coincidió en París, y que le incluyó en una antología de nuevas voces


hispanoamericanas cuando era casi un completo desconocido», afirma Rodríguez Moya. Como agradecimiento por su atención, Vargas Llosa le envió semanas después de finalizar el Festival un


ejemplar dedicado de 'Conversación en la Catedral'. «Era un ser humano encantador», añade el periodista. La noche anterior a esa visita, el escritor compartió una fiesta de


cumpleaños dedicada al escritor Benjamín Prado, que tuvo lugar en La Tertulia. El cantaor y escritor Juan Pinilla, quien acaba de publicar su primera novela, 'Los colores de la


nieve', recuerda aquella velada como «una noche entrañable, pero con muchos nervios por mi parte. Imagínese lo que supuso para mí encontrarme ante un personaje de su talla, responsable


además, en parte, de mi afición por la literatura, ya que me encantó un ensayo que había escrito sobre Madame Bovary, titulado 'La orgía perpetua'. Cuando terminó la velada estuvo


hablando conmigo para agradecerme el haber cantado, y recuerdo igualmente verle recorriendo La Tertulia y mirando las fotos de los artistas que habían pasado por allí», señala Pinilla.