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Istock A continuación algunos consejos fáciles para tener contento a tu empleador. In English | Aún si el trabajo del mundo digital te tiene al borde del precipicio, existe una manera

análoga y probada para salir adelante: aprende a adular con elegancia y dignidad. Los empleados de 50 años o más tienen una ventaja sobre sus colegas jóvenes ya que toma toda una vida

perfeccionar el talento para crear un balance entre la sinceridad y el atrevimiento. 1. EMPIEZA TODAS LAS CIRCULARES DIRIGIDAS A TUS SUPERIORES CON, "CÓMO SIN DUDA YA SABE..." Esto

cobra aún más eficacia cuando estás convencido de que tu jefe no tiene idea de lo que le estás hablando. 2. ASEGÚRATE DE QUE TUS REFERENCIAS A LA CULTURA POPULAR SON DE ESTE SIGLO Si tu

jefe joven se esmera en hacer referencia a _Game of Thrones_, no le argumentes con una mirada de sabelotodo a lo Spock y un ejemplo de la serie _Star Trek_. 3. PROPORCIONA TU SABIDURÍA CON

SENSATEZ Cuando ocurra una catástrofe, quizás te encuentres en una posición en la que puedes decir "he visto peores situaciones," pero si es posible, trata de no hacer referencia a

la tormenta de nieve del año 1965 más de una vez. 4. PIDE RECOMENDACIONES No hay nada más halagador que esto: "¿A dónde puedo llevar a nuestros clientes del extranjero a almorzar sin

tirar la casa por la ventana?" Es un dos por uno para ser lamebotas: estás pidiendo consejo gastronómico y claramente tratando de ahorrarle dinero a la compañía. 5. NO ADULES Trata un

acercamiento modificado al estilo Eddie Haskell, presenta tus halagos como preguntas: "¿Te molestaría decirme cómo manejaste esa situación con tal elegancia?" o "Nuestros

clientes respondieron muy bien a tu equipo. ¿Por qué crees que fue así?" Sin embargo, si a tu jefe le gusta que lo arropen hasta el cuello con halagos, entonces lisonjea con gusto.

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